No me gustaría palmarla

La gigantesca personalidad literaria de Boris Vian deliciosamente contenida en versos minúsculos e imágenes sutilmente evocadoras. Una experiencia poética y artística para ser celebrada por los incondicionales del escritor francés, pero también por los que quieran conectar por primera vez con este sublime rapsoda visceral. Mucho surrealismo y otro tanto de humor, a veces sarcástico a veces infantil, completan la receta. Ya ven, no me hubiera gustado palmarla sin haber leído este libro…